🔥 Lousteau contra Milei: “es el gobierno libertario más loco del mundo”
El senador nacional y candidato a diputado por Ciudadanos Unidos, Martín Lousteau, lanzó fuertes críticas contra el presidente Javier Milei por la reciente maniobra del Gobierno con las retenciones, que se subieron y bajaron en apenas 72 horas, y que según él derivó en un endeudamiento equivalente al 700% anual en dólares.
📌 Los principales cuestionamientos de Lousteau
- Contradicciones constantes: “Es el gobierno libertario más loco del mundo”, disparó Lousteau, acusando a Milei de intervenir en la economía mientras predica lo contrario.
- Retenciones express: denunció que la rebaja impositiva de tres días adelantó la liquidación de granos por un mes, lo que en la práctica significó pagar una tasa de 26% en dólares por 30 días, anualizada en 700%.
- Costo fiscal: “Los 1.800 millones de dólares que el Gobierno deja de percibir equivalen a endeudarse al 700% anual en dólares. Eso se lo dieron a grupos muy pequeños en tres días”.
- Doble discurso:
- “Milei va a la ONU y habla contra los organismos multilaterales, pero en abril le pidió plata al Fondo”.
- “Dice que hay que desmantelar el Estado, pero le pide plata a otro Estado”.
- Información privilegiada: insinuó que hubo conversaciones previas y posible tráfico de información: “Alguien podía comprar bonos en el premarket y quedarse con el rebote de acciones”.
- Carry trade 2.0: comparó la operación con las prácticas del carry trade: “El equipo económico se reunía con banqueros e inversores para explicarlo, mientras a la gente común le bajaban los ingresos y nunca le dijeron que sus ahorros se iban a pulverizar”.
🔎 Contexto
El gobierno había dispuesto una suba de retenciones para luego bajarlas en un breve lapso, con el fin de forzar la liquidación de divisas y reforzar las reservas del BCRA en medio de la tensión cambiaria. El resultado, según Lousteau, fue un negocio corto y costoso que benefició a pocos y dejó un alto costo fiscal.
Este cruce coloca a Lousteau en un rol de opositor frontal al libertarismo oficialista, combinando críticas técnicas con un tono político duro. El eje de la polémica será si la jugada del Gobierno fue un alivio transitorio o una bomba de tiempo fiscal y cambiaria.
