A partir de esta medianoche, Nueva Zelanda relajará al nivel más bajo las medidas tomadas en contra de la infección por Covid-19, luego de que la primera ministra Jacinda Arden informara que ya no queda ningún infectado en el territorio. En la práctica los ciudadanos podrán retornar a sus lugares de trabajo y reanudar sus atividades contidianas.
Nueva Zelanda entró en emergencia nacional el 25 de marzo con sólo 50 contagiados, ejecutando las medidas de restricción más drásticas en el mundo. A la fecha sólo han tenido 1.154 infectados y sólo 22 fallecidos.
Sin embargo el país aún no abrirá sus fronteras, mientras estudia poner en marcha una «burbuja» aérea con Australia. «Nadie quiere poner en peligro los logros de los neozelandeses», afirmó Ardern.
Nueva Zelanda lleva más de 17 días sin detectar ningún nuevo caso del coronavirus. Asimismo se anunció el resultado negativo en las pruebas de la Covid-19 del único paciente que quedaba. El gobierno prevee haber erradicado el virus fronteras adentro para el 15 de junio, cuando hayan pasado 28 días desde que se dio el alta al último caso de «infección local por fuente desconocida».
