Alain Verschueren es un artista belga que en los últimos días llamó mucho la atención a los viandantes de Bruselas por pasearse por la calle con una caja transparente a modo de casco en la cabeza. Él lo llama “oasis portátil”, una especie de invernadero que le permite caminar al aire libre sin la necesidad de llevar mascarilla y a la vez aislarse del mundo.
“Se trata de crear una burbuja en la que poder encerrarme para aislarme del mundo que me parecía demasiado aburrido, ruidoso y maloliente”, explica el artista de 61 años, que también cuenta que en la caja tiene plantas medicinales que lo protegen “como ocurriría en un oasis”.
