La fórmula oficialista, Martín Llaryora-Myriam Prunotto, se imponía en la categoría de gobernador y vice en una elección ultra-polarizada contra el binomio de Juntos por el Cambio (JxC), encabezado por Luis Juez y Marcos Carasso.
De esta manera, el actual intendente de la ciudad de Córdoba pegaría el salto al sillón del Centro Cívico cordobés, que ahora lo ocupa su jefe político y precandidato presidencial, Juan Schiaretti. Al cierre de esta nota, Llaryora obtenía el 42.73% contra el 39.77% que cosechaba Juez, con un total del 91,73% de las mesas procesadas.
El escrutinio oficial arrojó los primeros resultados alrededor de las 19 horas, con datos que llegaron desde Carlos Paz, Cosquín, La Falda y Marcos Juárez, en los que se utilizó el voto electrónico, y dieron a Juez con una leve ventaja.
Casi dos horas después, a las 21, comenzaron a cargarse en página oficial los sufragios emitidos por el resto de la provincia, que utilizó la Boleta Única de Sufragio (BUS), y los votos de las principales ciudades del norte de Córdoba, donde Llaryora sacó ventaja.
Para casi las 22 horas, fuertes gritos de alegría retumbaron en el Centro de Congresos del Hotel Quórum, en las afueras de la capital. Se trataba del cambio -definitivo- entre los dos animadores principales. Llaryora había pasado al frente por una mínima diferencia.






