Después de volar noche y día para recorrer 12.000 kilómetros desde París, Alberto Fernández aterrizó en el aeropuerto de Bali cuando el sol caía y el calor aún se pegoteaba en los trajes oficiales.
Fue un vuelo tranquilo, que el Presidente aprovechó para repasar sus discursos ante el G20, dialogar con Santiago Cafiero y Sergio Massa, y dormir mientras el chárter de Aerolíneas Argentinas abandonaba Europa y se dirigía a Indonesia.
Las conversaciones del mandatario con el canciller y el ministro de Economía sucedieron antes y después de la cena. El G20 es un escenario perfecto para avanzar en negociaciones multilaterales, si los guiones ya están escritos y las reuniones acordadas.
El Jefe de Estado, Cafiero y Massa abordaron las elecciones en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), los próximos encuentros con el presidente de China, Xi Jinping, y con la titular del FMI, Kristalina Georgieva, la iniciativa de cese el fuego en Ucrania que empuja Emmanuel Macron y el encuentro convocado por Joseph Biden, presidente de Estados Unidos, para debatir un fondo multimillonario destinado a Infraestructura.
Cerca de las 16.30 de Bali (11 horas menos en la Argentina), Alberto Fernández bajó del avión acompañado por Cafiero y Massa -la primera dama, Fabiola Yañez, se encuentra en Roma para participar de una campaña internacional contra el bullying-, fue recibido por un espectáculo de danzas nativas, saludó y se subió a un auto oficial con aire acondicionado que lo dejó en la puerta del hotel Melia.
El presidente cenará esta noche con Macron y otros mandatarios de África y Europa para analizar una propuesta de cese de hostilidades en Ucrania que intentarán presentar durante las deliberaciones del G20.
Esa iniciativa tiene un objetivo de máxima –inmediata tregua en Ucrania- y una pretensión de mínima: garantizar que Rusia no utilice armas tácticas de destrucción masiva y que ambos enemigos preserven la seguridad nuclear de la central de Zaporiyia.
El G20 de Bali comenzará formalmente mañana. Indonesia estableció tres rondas de trabajo y fijó la seguridad alimentaria y energética, la salud y la transformación digital como agenda temática.
En la primera jornada de deliberaciones se abordará la seguridad alimentaria y energética, y el debate es abierto y sin limites de tiempo al momento de la exposición. Y en las siguientes rondas, cada jefe de Estado elige un tema para exponer. Alberto Fernández optó por fijar su posición respecto a la salud y las asimetrías que existen entre el Norte y el Sur del globo.
Cuando concluya la primera sesión del G20, el Presidente, Cafiero y Massa se moverán a un salón blindado para encontrarse con Biden. Durante el G7 en Múnich, el líder norteamericano presentó un fondo de infraestructura con un monto cercano a los 650.000 millones de dólares, que apunta a contener la ofensiva inversora que China despliega por el mundo.